s difícil escribir
cuando te sorprende la noticia que una persona muy apreciada, dedicada a la filosofía, ha fallecido. Que su ausencia deja
tras sí una brillante obra, la que marca un derrotero en el ejercicio
reflexivo para las nuevas generaciones, en un país donde se concibe aún, que el
género femenino debe ser relegado a tareas domésticas.
Conocí a María Luisa
Rivara de Tuesta en un Congreso de Filosofía hace muchos años y nuestra primera conversación giró en torno
al pensamiento y la reflexión Inka, diálogo que se prolongó por muchos años. Me sorprendió el manejo profundo que tenía de las
fuentes manuscritas coloniales sobre el Perú y su erudición acerca del jesuita
Joseph de Acosta. Había publicado en la década del 70 un texto que estudiaba su pensamiento y siempre acotaba lo que Acosta opinaba sobre el
conocimiento logrado por los sabios andinos, los hamut’aq: “nos hacen grandes
ventajas”.
Su cercanía con el pensamiento peruano hizo frecuente mis visitas y encuentros para conversar sobre los avances y crítica de fuentes sobre la reflexión Inka. Una tarde fría -mientras conversábamos sobre las fuentes que
denotaban pensamientos originales de los hamut’aq- me recomendó leer como
fuente de apreciación crítica, la edición de Laureano Robles: Filosofía
iberoamericana en la época del encuentro (1992, Madrid:Trotta). En mi perplejidad
me alcanzó el ejemplar y me dio un plazo razonable para devolvérselo. Así era María Luisa
cuando se trataba de ahondar la investigación sobre el pensamiento peruano, no
escatimaba en proveer las fuentes y alentar la postura reflexiva personal.
Siempre me decía que
mejor hubiera estudiado Filosofía en San Marcos –estudié Educación, con
especialización en filosofía- y frecuentemente me confundía con alguno de sus
estudiantes. Nuestras conversaciones siempre terminaban resumiendo dos posturas
sobre los orígenes del pensamiento peruano: autoctonismo o universalismo
asuntivo de la filosofía.
El rigor de su
formación intelectual que formó en San Marcos, le hacía definir sus ideas
basadas en la solidez de la fuente escrita. No dejaba nada al azar, acotaba los
errores y potenciaba las ideas que construían un discurso creativo y coherente, recordaba
siempre el dicho de Aristóteles: “soy amigo de Platón, pero más amigo soy de la
verdad”. La maestría de María Luisa Rivara rebosaba nuestras expectativas sobre los nuevos
enfoques y estudios acerca del pensamiento peruano.
Cuando la Universidad Nacional de Educación, -mi alma mater-, otorgó Honoris Causa al Dr. Francisco Miro Quesada Cantuarias, preguntado por
quien leería el laudatorio, no dudó en nombrar a María Luisa Rivara. El panegírico que escribió llenaba de emoción al maestro y filósofo, no sólo
era un recuento de vida del homenajeado, sino un reconocimiento de
su obra y pensamiento, que también había forjado en ella un camino dentro de
la filosofía peruana y la gratitud a quien había forjado entre muchas
generaciones de pensadores.
La docencia no sólo
la ejercía en las aulas sino fuera de ella. Mis estudiantes de filosofía peruana en cada semestre de estudios tenían la obligación de indagar la obra y el pensamiento de determinado filósofo peruano. Grande fue mi sorpresa cuando ellas presentaron una entrevista grabada a
María Luisa Rivara. La claridad de su exposición y la profundidad de sus
reflexiones, hizo que amaran la filosofía cadavez más. La apertura a estudiantes de filosofía de otras universidades, dice
mucho de su labor como maestra.
Hoy, a más de un mes
de su sensible deceso, quiero rendir un sentido homenaje y reconocimiento de su obra filosófica que aporta a la filosofía peruana, es un adiós muy conmovedor para la amiga y filosofa.
Hasta siempre recordada María Luisa Rivara.
Obra publicada
(2000).
Tres ensayos sobre la filosofía en el Perú.
Lima. Fondo Editorial Banco de Reserva-Facultad de Letras UNMSM.
(2000). Pensamiento
prehispánico y filosofía e ideología en Latinoamérica. México D.F. En: Filosofía e historia de las ideas en Latinoamérica.
Vol. III. Fondo de Cultura Económica.
(1994). Pensamiento
prehispánico y filosofía e ideología en Latinoamérica. Lima. En: Areté, Vol 1, Nº 1, PUC, pp.103-116.
(1992). "El
Pensamiento incaico". En: Robles Laureano. Filosofía iberoamericana
en la época del encuentro.Madrid: Trotta. pp. 103 -116.
(s.f.). Pensamiento
Incaico: Wiracocha. Lima: Instituto de
Investigaciones humanísticas, U.N.M.S.M.
(1970). José
de Acosta: Un humanista reformista. Lima: Universo.
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